El dios serpiente azteca Quetzalcóatl ha cobrado vida en un extraordinario alquiler de Airbnb al norte de la Ciudad de México.
El Nido de Quetzalcoatl (Nido de Quetzalcóatl) es un Alquiler único en su tipo que está acumulando críticas favorables en Airbnb de huéspedes que han quedado encantados con su belleza surrealista. Ubicado lejos del ajetreo y el bullicio de la Ciudad de México en los exuberantes barrancos de Naucalpan, es el lugar perfecto para los huéspedes que buscan una estadía un poco fuera de la red llena de extravagantes delicias arquitectónicas.
Diseñado por el arquitecto mexicano Javier Senosiain, el complejo psicodélico alberga diez apartamentos privados en un jardín secreto. La estructura es una de las obras de arquitectura orgánica más representativas de Senosiain y recibió su nombre del dios azteca serpiente emplumada, Quetzalcoatl.
El objetivo de Senosiain era crear un espacio que se opusiera a la arquitectura tradicional de la Ciudad de México, respetando el entorno natural. La estructura está construida para hacer uso de las cuevas naturales y las curvas del terreno, con departamentos repartidos en 165,000 pies cuadrados que serpentean por la tierra como una serpiente deslizándose.
Uno de los apartamentos está abierto para que los huéspedes lo renten a través de Airbnb y pueden alojar hasta ocho personas en cinco habitaciones. Cada uno está totalmente equipado con sala de estar, cocina y lavadero. Las habitaciones están conectadas por varios túneles y para permitir la entrada de la máxima luz, no hay puertas, aparte de la entrada principal. Cada habitación también cuenta con increíbles vistas de la tierra circundante, que parece que se construyó con la imaginación de JRR Tolkien.
El complejo fue diseñado para tener un impacto mínimo en su entorno y sus extensos jardines y bosques se riegan con agua de lluvia recolectada. También hay un huerto en el lugar que los residentes utilizan para cultivar sus propios productos.
El desayuno está incluido en el precio de la reserva y se pueden organizar visitas privadas a los extensos jardines botánicos con la anfitriona Patricia, cuyo conocimiento innato de la tierra y la arquitectura hace que sea una actividad fascinante durante el día. Los huéspedes de Airbnb y los residentes privados son las únicas personas que tienen acceso a los jardines, por lo que la sensación de tranquilidad nunca se rompe.
Los precios comienzan desde US $ 227 (€ 196) por noche. Puede encontrar más información aquí.